Preparar una tarta, es una de las posibilidades más socorridas a la hora de disponerse a hacer postres con ruibarbo. Existe sin embargo, otra opción igual de interesante, que se le apareja en el trance de aprovechar su aspecto frutal. Esta opción, aunque con fines diferentes, es la mermelada de ruibarbo, elemento súper apetitoso como relleno de pasteles y sándwiches. Hacer mermelada plantea el asunto de decidirse por la manera de cocinar este delicioso dulce.
El sabor del ruibarbo es lo que hace posible que se le asuma, casi plenamente, como una fruta. El ruibarbo tiene un sabor ácido y dulce que lo vincula, acoplado a liberales proporciones de azúcar, con los postres. Siempre será necesario insistir en que lo que aprovechamos de esta casi fruta, son sólo los tallos. Recordemos que las hojas no son comestibles en razón de la toxicidad del ácido oxálico que contienen.
Como hemos dicho, el ruibarbo ha sido muy utilizado en repostería y la preparación de múltiples recetas dulces. Sin embargo, hoy solo vamos a brindarte un par de recetas para preparar la exquisita mermelada de ruibarbo.
1.- Mermelada de ruibarbo con ron
Ingredientes:
- 1 kg de ruibarbo.
- 750 gr de azúcar blanca.
- 1 litro de agua.
- 1 copa pequeña de ron o coñac.
- El jugo de un limón.
Preparación:
Lava y limpia perfectamente, los tallos del ruibarbo y córtalos en trozos de dos o tres centímetros.
Por a hervir los tallos de ruibarbo en una cazuela por alrededor de cinco minutos, o hasta que estén tiernos.
Agrega el azúcar, el jugo del limón y aumenta el fuego, remueve la mezcla constantemente, hasta que la mezcla espese lo suficiente.
Por último, agrega el licor y deja que repose hasta que enfríe.
2.- Mermelada de ruibarbo con ginebra
Ingredientes:
- 1 kg de ruibarbo.
- 800 gr de azúcar blanca o, 1 kg de azúcar de caña (esta endulza un poco menos).
- Agua en cantidad proporcional (entre 750 y 1000 ml).
- 1 copa pequeña de ginebra o cognac de buena calidad.
- El jugo de un limón.
Elaboración:
Limpia bien los tallos de ruibarbo (rasparlos pudiera ser una buena manera ya que son muy fibrosos) y cortarlos en trozos pequeños.
Cocínalos en agua hirviendo alrededor de unos 5 minutos.
Añade el azúcar, el jugo de limón y llévalos a fuego fuerte, revolviendo siempre hasta que el dulce vaya tomando consistencia.
El punto de mermelada se logra viendo el fondo de la cazuela, también se puede hacer la prueba del plato.
Agrega el licor y envasa en frascos previamente esterilizados cuando el dulce todavía esté caliente.
3.- Mermelada de ruibarbo y peras
Esta mermelada, como puedes ver, es solamente una variante que te pudiera gustar. El sabor propio de la pera es útil para compensar el fuerte sabor del ruibarbo. La elaboración es exactamente la misma que para las anteriores recetas aunque puedes corregir su gusto modificando proporciones. Más ruibarbo o más pera, según sea tu gusto.
Proporciones para cada ingrediente:
700 gr de ruibarbo / 300 gr de peras
500 gr de ruibarbo / 500 gr de peras
Si prefieres aumentar la cantidad de las peras, el sabor final de la mermelada será más suave y dulce. Y viceversa. Si es mayor la cantidad del ruibarbo, su sabor será más ácido pero, tal vez, más agradable.
No sería desaconsejable que vayas probando la mezcla a medida que se va cocinando. Así puedes corregir su sabor y lo llevas al punto que te interesa. Hay personas que sugieren añadir a la mermelada una cantidad muy pequeña de clavitos de olor.
Puedes hacerla con jengibre
Como matiz adicional en la preparación de esta última propuesta, puedes elegir agregar a la mermelada una pequeña cantidad jengibre. Esta alternativa para la mermelada de ruibarbo, la acerca un tanto al Chutney, alimento muy común en la India. Termina siendo una confitura con un sabor ácido muy especial. En diversos países suele aprovecharse para acompañar platos de queso y se suele usar en las rebanadas de pan de los desayunos.